martes, 26 de mayo de 2009

ESTUDIANTES PINCHÓ EN MUNRO

Con goles de Juan Gáspari y Cristian Bustos, Estudiantes superó a Colegiales por 2 a 1. El triunfo le asegura un lugar en el octogonal y rompe con un invicto de 25 partidos que ostentaba Colegiales jugando en Munro. El empate parcial para Cole lo había marcado Jonathan Torres.
En el duelo de alumnos, ninguno apostó a la desobediencia, cada cual hizo un juego acorde a sus pretensiones: Colegiales para buscar un mejor lugar aún para el ingreso al reducido y acrecentar sus chances más adelante y Estudiantes para confirmar su presencia entre los nueve mejores de la categoría. Sin embargo, en esa dinámica intensa, Estudiantes cayó mejor parado.
Es, por supuesto, poco conveniente hablar de justicia y, en última instancia, poco interesante aquí y ahora. Estudiantes y Colegiales no se regalaron nada, metieron y disputaron cada pelota hasta con el último respiro. El ganador debe estar orgulloso, por causas evidentes: Estudiantes se asegura un lugar en el octogonal y le corta un invicto de más de un año a Colegiales. El local, por su parte, falló en la serenidad. El Tricolor sufrió por ir a buscar el partido, por creer que después del gol de Torres, la victoria caía de madura. A Colegiales le faltó mente fría en los minutos finales y a Estudiantes le sobró precisión en las jugadas claves.
Durante la primera parte, el partido fue parejo, como casi todo el tiempo, no hubo un dominador claro, lo cierto, no obstante, es que Leo Ramos debió plantear el partido en la mitad, tapar a Orsi y las subidas de los volantes laterales de Colegiales, si se retrasaba, tenía todo para perder, si lo arriesgaba completamente, también.
En el ST, el juego continuó igual, pero el gol de Juan Gáspari para Estudiantes a los 30, obligó al conjunto de Néstor Ferraresi a entregarse enteramente en ofensiva. Una impecable definición de Torres a los 36, entusiasmó a propios y extraños con la posibilidad de la victoria y continuó impulsado en ataque. Una contra sobre el final. Un movimiento perfecto y un disparo preciso de Cristian Bustos sentenció la historia. El local cayó tras veinticinco partidos.

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