Con mucha ilusión y
expectativa se acercaron los hinchas del matador al Estadio Ciudad de Caseros
para presenciar el encuentro entre el conjunto local y Villa San Carlos. Tras
un mal arranque en el torneo, Estudiantes sumaba 6 partidos invicto, con tan
sólo un gol en contra y buscaba una nueva victoria que lo acercase a la cima de
la tabla. Su rival, por su parte, era otro de los animadores del certamen,
quien también pretendía seguir prendido en la discusión por ascender. El
enfrentamiento entre dos equipos de buen presente atrajo un buen marco de
público.
Parado tácticamente
con un 4-4-2, Estudiantes asumió el protagonismo esperable para un equipo
jugando de local y con aspiraciones de subir de categoría en los primeros
minutos de juego. Se hizo de la posesión de la pelota y presionó en la salida
del fondo del equipo visitante. Más allá de ello, no lograba plasmar ese dominio
en situaciones de peligro. Pablo Ruíz, de lo mejorcito en el arranque, tuvo la
primera chance de anotar, pero su remate salió desviado.
La apertura del
marcador llegó a los 22 minutos en los pies, cuándo no, de Cristian Yassogna.
Gómez tiró un centro desde la derecha, Soriano bajó la pelota en el área y el
goleador del Pincha en el torneo definió con clase al palo izquierdo del
arquero, justo cuando éste salía a atorarlo. Ventaja mínima para el conjunto
local.
Pasado el gol,
Estudiantes cedió la posesión, dejó de presionar en la salida del rival, perdió
protagonismo y así dio paso a las situaciones de gol del conjunto de Berisso.
Villa San Carlos contó con tres ocasiones claras para empatar el encuentro, sin
embargo, en ninguna de ellas la pelota logró tomar contacto con la red. La
primera situación fue muy bien bloqueada por el defensor central Zavaleta,
cuando uno de los delanteros visitantes se disponía a rematar desde el área
chica local. Luego fue Martín Ríos, una vez más, quien le permitió al Pincha
irse arriba en el marcador al descanso, salvando primero un mano a mano y luego
un fuerte cabezazo que logró desviar al córner.
El complemento
careció de buen juego y estuvo por debajo de lo exhibido en la primera mitad
por parte de ambos equipos. Estudiantes, conforme con la ventaja obtenida, optó
más por cortar los circuitos de juego del rival que por ir en búsqueda del segundo
gol. La visita, por su parte, mostró importantes falencias a la hora de definir
en las pocas ocasiones de gol con las que contó. El desarrollo del encuentro se
tornó trabado, con muchos pelotazos y pocas ideas claras. Justamente por la vía
aérea intentó el equipo de Berisso alcanzar el empate en los últimos minutos
del partido, pero sus atacantes no consiguieron conectar ningún cabezazo
certero que venciese la resistencia de Ríos y compañía.
Finalizó el encuentro
con una nueva victoria del Matador, ajustada y con más trabajo que brillo, la
cual, sin embargo, le permitió ascender al 4° puesto en la tabla de posiciones,
esperando aún que se complete el desarrollo de la fecha, y comenzar a relojear
la punta de forma más cercana. Siguen observándose falencias en el juego y
errores a corregir si se pretende pelear por uno los ascensos de manera seria,
pero se alcanzó, con el de ayer, el séptimo encuentro sin conocer la derrota,
consiguiendo 17 de los últimos 21 puntos que hubo en disputa (5 triunfos y 2 empates).
Un presente que hasta hace un mes parecía una utopía. El partido de la próxima
fecha no será uno más, ya que el rival de turno será nada más ni nada menos que
Almagro, el clásico rival de Estudiantes, de visitante. Conociendo todos la
relevancia que tienen los enfrentamientos de esta índole, el resultado que se
obtenga influirá anímicamente de manera más que importante para lo queda del
año.
Por Diego Torrado
Por Diego Torrado
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